Caminos del Río Uruguay S.A. (Crusa), alertó que más de 500 empleados quedarán a la deriva, tras el fin de la concesión, previsto para el 8 de abril. La empresa afirmó haber buscado soluciones con el Gobierno nacional, pero destacaron que no obtuvo respuestas hasta el momento.
Desde Caminos del Río Uruguay Sociedad Anónima (CRUSA), se dio a conocer un comunicado en el que comunicó que “luego de reuniones con la Dirección Nacional de Vialidad, la autoridad gubernamental rechazó dar una respuesta sobre la situación de los más de 500 empleados que hoy desempeñan distintas tareas a lo largo de los trazados bajo concesión de Caminos del Río Uruguay S.A”.
“Por este motivo y pese al insistente pedido que realizó CRUSA, ellos y sus familias, en su mayoría oriundas de localidades de la zona, no tienen hasta el momento seguridad sobre su futuro laboral a partir de la caída de la concesión, que se efectivizará el 8 de abril”, subrayaron.
Caminos del Río Uruguay afirmó haber informado sobre esta problemática por todos los medios posibles a los funcionarios gubernamentales, quienes se negaron a hacerse cargo de la situación. E indicaron que pese a “la dificultad que conlleva comprender una actitud tan negligente de las autoridades responsables”, seguirán “buscando alternativas para los trabajadores y sus familias”.
Crusa destacó que “el camino natural es prorrogar la concesión actual hasta que se defina un rumbo claro respecto de la licitación: esto significa, o bien que CRUSA continúe con su administración, o que comience una transición ordenada a una nueva concesionaria”.
Sin embargo: “Lamentablemente, desde el Gobierno Nacional, se rechazó esta propuesta ofrecida de buena fe por parte de la empresa, dejando sin respuestas las necesidades de usuarios y trabajadores”, remarcaron.