Desde las 3 de mañana de este martes, estaba programada en Paraná, tareas de mantenimiento en una de las cinco bombas de captación de agua cruda del río Paraná. Se trata de la bomba que extrae el recurso que posteriormente es trasladado para su potabilización en la planta Ramírez.
Debido a esta labor que lleva adelante el personal municipal en el muelle de la Toma Nueva, se resentirá la producción de agua potable en la planta de avenida Francisco Ramírez, la cual solo operará como centro de distribución del suministro que le es se genera en la planta Echeverría.
Las restantes cuatro bombas de captación de agua mantienen su capacidad operativa a pleno y el tratamiento del agua en la planta Echeverría no se verá afectado. La zona Oeste de la ciudad y partes del área céntrica, que son atendidas por los centros distribuidores Ramírez y Ejército, experimentarán una reducción del suministro de agua. Las tareas se extenderán hasta horas de la tarde.
Se recomienda a los usuarios que adopten las previsiones pertinentes y utilicen el agua de forma racional.
Señalaron desde el municipio que las tareas están a cargo de la Subsecretaría de Obras Sanitarias, en coordinación con la Secretaría de Servicios Públicos.