Según se desprende en sus fundamentos, la iniciativa busca evitar el adoctrinamiento en las escuelas entrerrianas y “dar protección a los niños, niñas y adolescentes, frente a los intentos de perjudicar su libertad de expresión, torcer su decisión, o imponer a la fuerza determinados temas o agendas, o ideas partidarias”.
Ingresó a la Cámara de Diputados de la provincia un proyecto de ley que pretende modificar la Ley de Educación Provincial, N° 9890. La iniciativa tiene la autoría de la diputada Erica Vázquez (JxER) y tiene como objetivo evitar el adoctrinamiento de estudiantes en las escuelas entrerrianas.
En la iniciativa propone cambiar el inciso b) del artículo 13 de la ley 9890 –que expresa los fines y objetivos de la educación entrerriana– incorporándole el siguiente párrafo: “Queda expresamente prohibido el adoctrinamiento en cualquiera de sus formas, siendo posible la sanción tanto del docente, directivo o funcionario que lo impartiera”.
Además, en el inciso d) del artículo 131 –referido a las obligaciones de los docentes– propone introducir un concepto similar: “Queda expresamente prohibido el adoctrinamiento en cualquiera de sus formas, en cualquier espacio dentro de la institución educativa, dentro y fuera del horario escolar, así como la exhibición y entrega de cualquier material, de cualquier índole, que busque el adoctrinamiento en cualquiera de sus formas”.
Finalizando, agrega el texto “no recibir ningún adoctrinamiento por parte de docentes, directivos y funcionarios” en el inciso h) del artículo 133, que enumera los derechos de los estudiantes.
“En los últimos años, a la decadencia educativa y el deterioro de nuestra situación socioeconómica, se le han sumado reiterados hechos que buscan adoctrinar a los alumnos, negando cualquier diálogo democrático, por parte de docentes, directivos y funcionarios que realizan un abuso de su autoridad”, expresa la legisladora en los fundamentos de la iniciativa.
“Este proyecto busca dar protección a los niños, niñas y adolescentes, frente a los intentos de perjudicar su libertad de expresión, torcer su decisión, o imponer a la fuerza determinados temas o agendas, o ideas partidarias”, destaca y señala que “ la educación debe ser equitativa, sin vicio alguno”.